jueves, marzo 15, 2007
¿Por mi seguridad? ¿Seguro?
En el mes de diciembre recibí una notificación de denuncia de la dirección General de tráfico mediante la cual se me instaba a identificar al conductor de mi vehículo en el momento en el que, según ellos, circulaba por la radial R3 a más velocidad de la permitida, concretamente un miércoles por la mañana. Lo gracioso del asunto es que en ese preciso momento yo estaba trabajando, y mi coche aparcado en las cercanías de mi trabajo. Inmediatamente me personé en tráfico y solicité la prueba fotográfica. Pues bien, ayer recibo una nueva notificación de sanción, esta vez de 310 € (la sanción inicial era de 100 €), por no haber identificado al conductor del vehículo.Total, que si identifico al conductor (en este caso yo mismo), estoy reconociendo que soy yo quien conducía en el momento en el que se produjo la supuesta infracción, aceptando la sanción de 100 €, y si no lo identifico, me sancionan por no hacerlo con un importe tres veces superior al inicial. ¿Cómo se come esto?
Pues nada, toca otra vez presentar un recurso, e intentar hacer ver a estos señores que su sistema, en primer lugar, se equivoca al reconocer las matrículas de los vehículos a los que sanciona, y en segundo lugar, se vuelve a equivocar al no tener en cuenta la presunción de inocencia, y pasarse por el forro las alegaciones realizadas por el denunciado.
Miedito me da cuando entre en funcionamiento el nuevo centro automático de denuncias que tienen previsto poner en marcha en León.
