viernes, septiembre 15, 2006

Manipulación I: El poder de los medios


Se puede comprobar a diario. Los medios de comunicación ejercen un terrible poder sobre nosotros.

Hoy mismo, durante una comida con mis padres, charlando de esto y aquello ha surgido una conversación acerca de qué es verdad, y qué es mentira. ¿Es verdad que el World Trade Center lo derribaron unos extremistas islámicos? ¿Es seguro que los trenes del 11-M no volaron fruto de la codicia política española? De pronto mi padre comenta "...ni lo de la luna es verdad. El otro día lo dieron por la tele, y resulta que no han ido a la luna". He insistido en que se trata de un rumor (de qué otra cosa podía tratarse... qué puede argumentarse para demostrar que la luna no ha sido pisada por el hombre...), y él ha aclarado "no, no, que han dado la noticia de que era mentira".

Claro, yo he estado de vacaciones doce días, sin contacto con noticia alguna, y nunca veo la televisión pública (ni privada), por lo que no se... quizás... lo mismo me he perdido semejante momentazo. ¿O quizás lo que pasa es que la TV tiene un poder terrible sobre las personas?

Para la gente mayor, un "lo han dao en la tele" es como un "ha bajado el mismísimo Dios, vestido de notario, con corbata de punto, y ha firmado un documento en el que asegura que es verdad, y ha dado fé de ello".

To be continued...

Comments:
Jo, jo. ¡Machote! Ahora sí que has puesto el dedo en la llaga.

Este es el gran problemón de nuestro tiempo y aún no existen corrientes sociales para oponerse a él con eficacia. Para resumir: nos tienen a todos cogidos por los güevos. Aunque parezca un contrasentido, vivimos en un mundo en el que es posible hablar de "la dictadura de la mayoría". Sí, sí, esa a la que le enseñas un palo con música tenebrosa y se creen que han visto un OVNI.

Ridiela. Cagontón...
 
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